INLAKESH

ALOHA

NAMASTE ...

Si bien todos los lugares son sagrados, precisamos todavía crear algunos en los que pongamos nuestra intencion de reconectar con la Divinidad, ya sea alli afuera o en nuestro interior

Necesitamos un lugar para estar en paz, para agradecer, para reverenciar, para orar, para estar en silencio, para sentir la tierra debajo nuestro, al cielo sobre nosotros. para abrir nuestra mente y nuestro corazón a lo sagrado.

Este templo está dedicado a todas las manifestaciones de lo sagrado en esta tierra, abarcando las antigüas tradiciones chamánicas comunes a casi todos los pueblos y sus desarrollos en todos los continentes y tiempos.

También lo dedico con gratitud a todos mis maestros, formales, informales, visibles e invisibles, presentes, pasados y en todos los terrenos de la vida. Gracias!

Paz profunda



Viajero del Infinito!

Que el eterno sol te ilumine siempre, que el amor crezca a tu alrededor y la luz pura de tu corazón te guíe de regreso al hogar.
Sat Nam




Oracion de la Serenidad - version completa


“Dios, concédeme la serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, el valor para cambiar las cosas que puedo cambiar y la sabiduría para conocer la diferencia; viviendo un día a la vez, disfrutando un momento a la vez; aceptando las adversidades como un camino hacia la paz; pidiendo, como lo hizo Dios, en este mundo pecador tal y como es, y no como me gustaría que fuera; creyendo que Tú harás que todas las cosas estén bien si yo me entrego a Tu voluntad; de modo que pueda ser razonablemente feliz en esta vida e increíblemente feliz Contigo en la siguiente. Amen.”

Oración de la Serenidad. de Reinhold Niebuhr. (Wrigth City, 1892-Stockbridge, 1971) Teólogo estadounidense.

Para cortar las mil cabezas del ego...



Gayatri Mantra






OM
BHUR BUBA SWAHA
TAT SAVITUR VARENYAM
BHARGO DEVASYA DHIMAHI
DHIYOYONA PRACHODAYAT


OM SHANTI: SHANTI: SHANTI:



OM - Símbolo de"Para Brahman" Bhur - Plano físico Bhuvah - Plano astral Suaha - Plano espiritual o celestial (Shuah) Tat - Eso que es - Paramatman transcendental Savitur - Ishvara - El Creador Varenyam - A quien es justo adorar Bhargo - La luz que confiere sabiduría - Destructor de todos los pecados e ignoancia Devasya - Realidad divian - Resplandeciente - Brillante Dhimahi - Meditamos Dhio - Buddhi - Intelecto - Entendimiento (Dhüo - Dhi io) Io Nah - quien nuestro Prachodayat - Ilumine - Guíe
Traducción:
Meditamos en la gloria del Creador del Universo (Ishvara), a quien es justo adorar, que es una encarnación del conocimiento y la luz y que es el destructor de todos los pecados y la ignorancia. Ojalá que Él ilumine nuestros intelectos.

Version de Alice Bailey:
Oh Tú, sustentador del Universo, De Quien todas las cosas proceden, A Quien todas las cosas retornan, Revélanos el rostro del verdadero Sol Espiritual, Oculto por un disco de luz dorada, Para que conozcamos la verdad, y cumplamos con todo nuestro deber, Mientras nos encaminamos hacia Tus sagrados pies.


Informacion Adicional por Parvathi-Kumar 

Círculo Mundial del Mantra GAYATRI 

Por la gracia de Dios



Es por tu gracia que puedo cantar
Es por tu gracia que puedo sentir
Es por tu gracia que siento el nombre sagrado

El día vendrá en que toda la gloria sea tuya
Todos dirán que es tuya
y yo no negaré la mía

Allah
Jevovah
Rama
Satanama

Paz para todos
Vida para todos
Amor para todos

Gratitud

1.
No lamentes lo que no ha pasado
a veces las cosas no suceden para evitar otros males

2.
No te quejes, no expliques

3.
Dar gracias por la abundancia es más dulce que la abundancia misma
10:07 

Rumi

Camino Hacia Adentro


Quien encontró el camino hacia adentro,
quien en el hundirse ardiente en uno mismo
el núcleo presintió de la sabiduría,
ése elegirá con su sentido a Dios y al mundo
como su imagen y su alegoría:
cada obra y cada pensamiento
diálogo serán con el alma que le es propia
que a Dios y al mundo en sí contiene.

HERMAN HESSE 

Instante


Unas hojas,
unas pocas hojas sacudidas
                               por el viento.
 
Un temblor en oscuro bosque,
                                    un destello de vida,
                                                          un instante de niño.

Hugo Mujica

Sermon de la Benevolencia



Que todos lo seres sean felices,
cualquiera sea su naturaleza,
débiles o poderosos, sin excepción alguna,
largos o grandes de cuerpo,
medianos o pequeños, toscos o delicados.
Los que se ven y los que no se ven,
los que están cerca y los que están lejos,
los nacidos y los por nacer.
Que todos lo seres sean felices.
Que nadie engañe nunca al otro
ni le desprecie por ningún motivo,
ni se deje mover por ira o por odio
a desear el mal de otro ser viviente.
Igual que una madre, que dará la vida
por su propio hijo, por su único hijo,
ábrase el ánimo sin límite ninguno
rebosante de benevolencia
pura con todo el mundo y en todas las direcciones
arriba, abajo, alrededor
sin odio, sin enemistad, sin reserva alguna.

Buda

Sept. 21 - Día Internacional de la Paz




SEAMOS la PAZ que queremos para el mundo...

Flores I


"La Tierra, hace 114 millones de años, un día poco después de despuntar el alba: la primera flor en existir
sobre el planeta abre sus pétalos para recibir los rayos del sol. Con anterioridad a ese suceso extraordinario
que anuncia la transformación evolutiva de la vida vegetal, el planeta había estado cubierto de vegetación
durante millones de años. Es probable que la primera flor no hubiera sobrevivido por mucho tiempo y que las
flores hubieran seguido siendo fenómenos raros y aislados, puesto que las condiciones seguramente no eran
favorables para una florescencia generalizada. Sin embargo, un día se llegó a un umbral crítico y
súbitamente debió producirse una explosión de colores y aromas por todo el planeta, de haber habido una
conciencia con capacidad de percepción para presenciarla.

Mucho tiempo después, esos seres delicados y perfumados a los cuales denominamos flores
desempeñarían un papel esencial en la evolución de la conciencia de otras especies. Los seres humanos se
sentirían cada vez más atraídos y fascinados por ellas. Seguramente, a medida que la conciencia
humana se fue desarrollando, las flores pudieron ser la primera cosa que los seres humanos valoraron
sin que representaran un valor utilitario para ellos, es decir, sin que tuvieran alguna relación con su
supervivencia. Sirvieron de inspiración para un sinnúmero de artistas, poetas y místicos. Jesús nos
dice que contemplemos las flores y aprendamos a vivir como ellas. Se dice que Buda pronunció una
vez un "sermón silencioso" mientras contemplaba una flor. Al cabo de un rato, uno de los presentes,
un monje de nombre Mahakasyapa, comenzó a sonreír. Se dice que fue el único que comprendió el
sermón. Según la leyenda, esa sonrisa (la realización) pasó a veintiocho maestros sucesivos y mucho
después se convirtió en el origen del Zen.

La belleza de una flor pudo arrojar un breve destello de luz sobre la parte esencial más profunda del
ser humano, su verdadera naturaleza. El momento en que se reconoció por primera vez la belleza fue
uno de los más significativos de la evolución de la conciencia humana. Los sentimientos de alegría y
amor están íntimamente ligados con ese reconocimiento. Sin que nos diéramos cuenta, las flores se
convertirían en una forma de expresión muy elevada y sagrada que moraría dentro de nosotros pero
que no tendría forma. Las flores, con su vida más efímera, etérea y delicada que la de las plantas de las
cuales nacieron, se convertirían en especie de mensajeras de otro plano, un puente entre el mundo de
las formas físicas y de lo informe. Su aroma no solamente era delicado y agradable para los sentidos,
sino que traía una fragancia desde el plano del espíritu. Si utilizamos la palabra "iluminación" en un
sentido más amplio del aceptado convencionalmente, podríamos pensar que las flores constituyen la
iluminación de las plantas."

Echart Tolle - Una Nueva Tierra

Sonidos que sanan

Siri Gaitri Mantra. 

Ra es el Sol, Ma es la Luna, Da es la Tierra, y Sa es Infinidad. Say es la totalidad de la Infinidad, y So Hung es "Yo soy Vos". "Ra Ma Da Sa" es el mantra de la Tierra, y "Sa Say So Hung" es el mantra del éter.









el que (no) busca ... encuentra



"Cuando buscas conocerlo,
no puedes verlo.
No puedes cogerlo
pero tampoco puedes perderlo.
Al no ser capaz de obtenerlo,
lo obtienes.
Cuando estás silencioso,
él habla.
Cuando tú hablas,
él guarda silencio.
La gran puerta está completamente abierta
para las almas generosas,
y ninguna magnitud impide el paso."

poema zen

Los Diez Toros del Zen



1. La Búsqueda el Toro.

Recorro interminablemente los pastos de este mundo en busca del toro.
Atravieso innumerables ríos, perdido en impenetrables perfiles de distantes montañas.
Fallece mi fortaleza y se agota mi vitalidad, no encuentro el toro.
En la noche sólo oigo el chirriar de las cigarras a través del bosque.


2. Descubrir sus Huellas.

!Junto a la rivera bajo unos árboles, descubro huellas!
Incluso sobre el fragante pasto veo sus pisadas.
Están en lo profundo de las montañas remotas.
Este rastro no puede ocultarse a ninguna nariz que apunte al cielo.

3. Encontrar al Toro.

Oigo la canción del ruiseñor.
El sol es cálido, la brisa suave, los sauces verdean a lo largo de la ribera,
Aquí ninguno toro puede ocultarse!
¿ Qué artista podría dibujar tan soberbia cabeza, cornamenta tan majestuosa?

4. Apresar al Toro.
Lo apreso con feroz lucha.
Su gran poder y voluntad son inagotables.
Desde la colina embiste a la inalcanzable nube lejana,
O permanece en un barranco impenetrable.

5. La doma del Toro
Preciso el látigo y la soga,
De lo contrario, se escaparía por caminos polvorientos.
Si está bien domesticado, llega a ser dócil con naturalidad.
Entonces, sin herraduras, obedecerá a su dueño.

6. Montándolo hasta casa.
Monto el toro, lentamente regreso a casa.
El son de mi flauta endulza la tarde.
Marco con palmas la armonía que me acompaña, y dirijo el ritmo eterno.
Quien oiga esta melodía se unirá a mí.

7. Trascendiendo al Toro.
 A horcajadas sobre el toro, llego a mi hogar.
Estoy sereno.
El toro también puede reposar.
Empieza a amanecer.
En el plácido descanso, bajo el techo de mi morada, abandono el látigo y la soga.

8. Ambos, el toro y mi mismidad, trascienden.

Látigo, soga, mismidad, y toro, todo llega a "no-ser".
Este cielo tiene tal amplitud que ningún término puede abarcarlo.
¿ Como puede existir un copo de nieve en un fuego ardiente?
Aquí hay huellas de patriarcas.

9. Alcanzar la Fuente.
Demasiados pasos se han dado para regresar a la raíz y la fuente.
!Mejor hubiera sido sordo y ciego desde el inicio!
Morar en la propia intimidad, indiferente a lo de fuera.
Las aguas del río fluyen plácidas y las flores son rojas.

10. En el Mundo.
Descalzo y con el pecho al descubierto, me mezclo con la muchedumbre.
Mis ropas son andrajosas y polvorientas, y siempre mantengo la placidez.
No uso magia alguna para prolongar mi vida;
Ahora, ante mí, los árboles muertos aparecen vivos.

Kokuan

Excelente análisis de Dokoshu Villalba en "La Doma del Buey"

VISITA EN SUEÑOS A LA MONTAÑA MADRE DEL CIELO



(Canto de adiós)

Los navegantes hablan de islas encantadas
perdidas entre la niebla y las olas,
pero los hombres de Yueh hablan de la Montaña Madre del Cielo
que se muestra a través de las grietas en las nubes que rielan.
La Madre del Cielo se remonta al firmamento, atraviesa el horizonte,
se proyecta sobre los Cinco Picos y la Fortaleza Escarlata,
mientras la Terraza del Cielo, a ciento sesenta mil metros de altura,
se tambalea hacia el Sudeste ante ella.
De este modo, anhelante en mis sueños por Wu y Yueh,
una noche volé sobre el Lago del Espejo, bajo la luna,
la luna derramó mi sombra sobre el agua
y viajó conmigo hasta el propio Yenshi.
El pabellón del señor Hsie aún permanecía
donde las aguas verdes se arremolinaban y el chillido de los monos era estridente.
Calzando los zapatos de Hsie, trepé por la oscura escalera de las nubes,
a medio camino vi surgir del océano el sol
y oí el canto del Gallo del Cielo.
Y mi senda se enroscó a través de mil despeñaderos.
Embriagado por las llores me recosté contra una roca
y de pronto todo estaba oscuro.
Resonaron gruñidos de osos y rezongos de dragones
entre las rocas y los arroyos.
La selva impenetrable me aterrorizó, huí de los acantilados amenazantes,
oscuras eran las nubes, pesadas de lluvia,
las aguas hirvientes se convirtieron en brumosos rocíos,
se encendían relámpagos, el trueno resonaba,
los picachos temblaban, los guijarros se rompían
y el umbral de piedra de una enorme caverna se abría en un bostezo.
Debajo de mí, un vacío insondable de azul,
el sol y la luna fulguraban sobre terrazas de plata y de oro;
con arcoiris por ropajes y vientos por corceles,
los amos de las nubes descendieron como anfitriones poderosos,
los fénixes rodeaban las carrozas, los tigres tocaban la cítara
mientras pasaban los inmortales fila tras fila.
Mi corazón estaba embargado por el miedo y el asombro
y despertando sobresaltado, grité
pues nada había allí, salvo mi estera y mi almohada:
el mundo de tinieblas y nubes había desaparecido.
Y así ocurre con los placeres de esta vida:
todo pasa, como el agua corre hacia el Este.
Te dejo, amigo, ¿cuándo volveré?
Iré a pastorear ciervos blancos entre los picachos verdes
y cabalgando visitaré montañas famosas en la leyenda.
¿Querrías que inclinase la cabeza ante príncipes poderosos
olvidando toda la alegría de mi corazón?

LI PO

A todos mis ancestros... desde el origen


 
No estamos sólos en esta vida.  

 A nuestras familia de sangre y nuestra familia espiritual, a los amigos compañeros y colegas, a los vecinos, comunidad y a todos las colectividades que pertenecemos debemos incluir también a nuestros ancestros. 

La cultura occidental no suele reconocer esta dimensión sistémica. Creo que es en gran medida al individualismo excacerbado y a la negación de la muerte que debemos este olvido injusto y triste (sé que yo he participado de ello la mayor parte de mi vida). 

Otros factores también importantes son la aceleración y la fascinación del cambio que nos lleva a despreciar lo anterior, lo “antigüo”, lo pasado, proyectándonos locamente hacia el futuro y la ilusión de estar, de alguna manera, “creando” permanentemente un nuevo mundo que necesita constituirse a partir de la negación de lo anterior. El rechazo de las formas autoritarias y asfixiantes de ciertas modalidades del conservadurismo y la imposición de algunas caricaturas de la  “tradición”  utilizadas como herramientas ideológicas y de control social también meten en la misma “bolsa” a todo aquello que hemos recibido de las generaciones pasadas que  con su esfuerzo, sus sueños, sus penurias y alegrías, su confianza en el futuro permiten que nosotros estemos aquí, para seguir intentándolo, para nosotros y nuestros descendientes. 

Mirar para atrás y verlos en esa misma lucha por la vida me reconforta, me da valor y renueva mi fé en nuestra capacidad de sobrellevar hasta las circunstancias más adversas. Cuando vemos la locura, la crueldad, el desprecio por la vida, las enormes dificultades de todo tipo que han tenido que enfrentar nuestros ancestros, nos damos cuenta del milagro que es estar hoy aquí y cuánto tenemos también que agradecer y agradecerles.

Honra y Honor a todos ellos! Los llevamos en el corazón.

El hombre es un buscador incesante, un guerrero, una caminante, un peregrino...
En su andar, tropieza con obstáculos, encuentra tesoros, recibe dadivas, pierde y recupera bienes.
Cultiva virtudes, desarrolla habilidades, afianza creencias, renuncia a mandatos.
Recupera su ser esencial, deja atrás el pasado, aprecia el don de la vida.
Caminante, viajero, aprendiz, artesano.
Creador, artífice, mago, hechicero.
Danzarín, músico, cantante, escultor, poeta.

El hombre es un buscador incesante. Se encamina hacia su destino a través de sus sueños y proyectos que son como hojas de ruta que lo llevan al centro de sí mismo.
Cuando se desalienta, cuando teme no llegar a cumplir con sus anhelos, desfallece y lo vence el pesimismo.
Deja de creer, teme fracasar.
Si te encuentras en ese rescoldo en que todo parece perdido y lo que ansias parece imposible no dejes de repetirte a ti mismo.

Que la luz vuelva a mi camino.
Que encuentre el sendero que perdí
Que la fe me sostenga. La esperanza no me falte y la serenidad me acompañe a pesar de los obstáculos.
Que me sienta acompañado, aún en la aparente soledad.

Que avance aunque sea a tientas, pero que no me detenga y que en las horas de la desazón recuerde que lo que parece oscuridad es reflejo de mi desesperanza, que sí creo estar detenido, es sólo una ilusión de mi mente, ya que en la vida todo es andar y que retroceder es también un modo ilusorio de concebir el paso que estoy dando, ya que nunca se vuelve al mismo lugar.

Maria Elena García Novarini
Proyecto Bitácora